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Why opt for renewable energies?

Electricity and heat are the elixirs of human life. They not only provide the essentials, such as heating or light, but also enable industrial production, mobility, communication, entertainment and much more. Energy makes our society function.

Renewable energies are national resources. Their use reduces dependence on oil and gas supplies from politically unstable regions, with which we, as citizens of free and democratic societies, simultaneously finance authoritarian regimes and human rights violations.Wind turbines and solar plants can be dismantled and largely recycled. There is no radioactive waste or other eternal damage as in mining.

Conserving resources and the environment

A sustainable and environmentally compatible energy supply is therefore the order of the day and is the prerequisite for us to be able to use electricity and heat in the future as well. After all, the long-standing dominant energy supply based on fossil raw materials and nuclear power is not sustainable in the long term. Limited resources, environmental pollution and climate change are the drawbacks of this energy supply, and it is becoming increasingly clear that they far outweigh the benefits.

Infinite energy from renewable sources

Renewable energies represent a sustainable energy supply. They include wind energy, solar energy, various forms of bioenergy, hydropower and geothermal energy or geothermal heat. What they have in common is that they are inexhaustible or rapidly renewable by human standards. Renewable energies have been used for centuries, but have lost ground due to the use of fossil fuels and nuclear energy, especially in industrialized countries. However, for the past few decades, they have been on the rise again. And there are good reasons for this.

Advantages of renewable energies

Las energías renovables son inagotables para el ser humano.
No hay costes de combustible cuando se utilizan energías renovables (excepto la bioenergía).
Las energías renovables pueden ofrecer estabilidad de precios a largo plazo.


El uso de energías renovables supone una protección activa del medio ambiente y del clima, ya que se producen muy pocas emisiones. Esto se aplica tanto a los gases de efecto invernadero como a otros contaminantes.
La extracción de combustibles no causa daños a las personas ni al medio ambiente (como en el caso de la producción de petróleo, debido a las fugas y los accidentes de los camiones cisterna, o en el caso de la minería del lignito, debido a la devastación de franjas enteras de tierra y el reasentamiento de los residentes locales).


Las energías renovables se producen de forma regional y descentralizada. Esto significa que muchos habitantes de la zona se benefician del valor añadido que genera la producción de electricidad. Los agricultores, los propietarios de viviendas y las empresas se convierten en productores de electricidad, al igual que los ciudadanos que se afilian a cooperativas, compran acciones de plantas solares ciudadanas y parques eólicos, se benefician de ofertas especiales de electricidad o compran bonos de ahorro. La EEG también garantiza la participación financiera de las comunidades que rodean los parques eólicos.
Las energías renovables son recursos nacionales. Su uso reduce la dependencia de los suministros de petróleo y gas de regiones políticamente inestables, con los que, como ciudadanos de sociedades libres y democráticas, financiamos simultáneamente regímenes autoritarios y violaciones de los derechos humanos.
Los aerogeneradores y las plantas solares pueden desmontarse y reciclarse en gran medida. No hay residuos radiactivos ni otros daños eternos como en la minería.

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